“Soy David Millar, y me he dopado”, así comienza la historia que no deja de atraparnos frente a la pantalla y olvidarnos que los 30 minutos pasan en un instante. Una vida de gloria y frustración por intentar luchar contra un sistema.
“Soy David Millar, y me he dopado”, así comienza la historia que no deja de atraparnos frente a la pantalla y olvidarnos que los 30 minutos pasan en un instante. Una vida de gloria y frustración por intentar luchar contra un sistema.
Send this to a friend